Nicanor Parra (San Fabián de Alico, Xile, 1914 – Santiago de Xile, 2018)

Ya que la vida del hombre no es sino una acción a distancia,
Un poco de espuma que brilla en el interior de un vaso;
Ya que los árboles no son sino muebles que se agitan:
No son sino sillas y mesas en movimiento perpetuo;
Ya que nosotros mismos no somos más que seres
(Como el dios mismo no es otra cosa que dios)
Ya que no hablamos para ser escuchados
Sino que para que los demás hablen
Y el eco es anterior a las voces que lo producen,
Ya que ni siquiera tenemos el consuelo de un caos
En el jardín que bosteza y que se llena de aire,
Un rompecabezas que es preciso resolver antes de morir
Para poder resucitar después tranquilamente
Cuando se ha usado en exceso de la mujer;
Ya que también existe un cielo en el infierno,
Dejad que yo también haga algunas cosas:
Yo quiero hacer un ruido con los pies
Y quiero que mi alma encuentre su cuerpo.

Nicanor Parra ens ha deixat als 103 anys. El poeta xilè va ser un gran renovador de la poesia llatinoamericana del segle XX i el creador de l’antipoesia, un estil trencador de fer poesia, més directa i col·loquial. Entre els nombrosos guardons que li van ésser atorgats destaquem el Premi Cervantes l’any 2011. El poema que us recomanem forma part del seu llibre “Poemas y antipoemas” (Ed. Nascimento, 1954).


Secció realitzada per la poeta Anna Garcia Garay
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